martes, 15 de marzo de 2011

LOS DOLORES MISTERIOSOS

Estamos tan tranquilos en casa, acabamos de comer y nos disponemos a descansar un rato en el sofá, mientras vemos un programillo de la tele.
De repente nos empezamos a sentir mal, un pinchazo por aquí, otro por allá.
Uno no le hace mucho caso, pensando que ya se pasara como en otras ocasiones, que igual que vinieron esos pinchazos molestos igual al rato desapareceran.
Tú, sin quererle dar importancia, te recuestas en el sofá para ver si con otra postura la cosa desaparece.
Pero por mas que te cambias de postura como si tuvieras el baile de San Vito, chico que la cosa va cada vez peor, el dolor, ya no es un dolorcillo adormecido, ya se ha convertido en un dolor dolor.
Cada vez te va doliendo más y más. Vas al wc esperando que se pase, y en vez de quitarse se te pone mas todavía. Al final la cosa se complica tanto, que empiezas a preocuparte de verdad; se te revuelve el cuerpo , te mareas y ya has llegado a tal punto de dolores que te tienen que llevar a Urgencias.
A todo esto son las 2 de la mañana has pasado una tarde toledana, (como decimos).
Cuando llegas al hospital, no puedes ni andar, te tienen que meter en silla de ruedas.
Los médicos, te empiezan a hacer pruebas, te hacen análisis, te colocan una vía con un suero y te dan un calmante.
Tú allí solo, porque tus familiares se quedan en la sala de espera con alta preocupación.
Por fin una enfermera te suelta que a lo mejor tienes apendicitis y que entonces te tendrían que operar esa misma noche. Tu te quedas con cara de boba y bastante asustada. Se te pasa por la cabeza de todo.Por fin, dejan entrar a uno de tus familiares, que ya se ha enterado de la posibilidad de la operación.
Hay que esperar que salga el resultado de los análisis y esa espera es larga...larga... larga...
Ya son las 4 de la madrugada, y el médico informa que no es apendicitis.
A ti el dolor se te ha quitado con los calmantes que te han metido en el suero.
Con lo cual te dice el medico, que no cree que sea nada grave y que mañana te vayas a tu medico de cabecera. Y te marchas a tu casa a dormir muy poco porque es muy tarde como si nada hubiera pasado.
Naturalmente, tu no lo olvidas y vas a tu medico y a cinco o seis especialistas más. Al final te has hecho un chequeo completísimo y todo ha dado bien.
Para terminar, el ultimo médico que vás, te dice que lo mas seguro es que hayas tenido un episodio de gases.
Me cago en todo lo que se menea, !vaya solución!.  Lo peor es, que hasta puede ser verdad, porque los gases son tremendos.
A una amiga mía, no fue apendicitis lo que le diagnosticaron, a ella le diagnosticaron un ataque al corazón.
Conclusión: cuidadin con los gases que se te puede liar un cisco en urgencias, como vuelvas a ir con el mismo dolor. Mejor antes, tómate un calmante.

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